martes, 20 de noviembre de 2012

¡Corre, viajero...! ¡Corre!

El Jazmín no llegó a su destino, en la noche cuando el viento bajo la luna se mezclaba... Las nubes viajaban sin rumbo fijo, como el Alma del viajero tironeada por la avidez.
-El Jazmín perfumará donde sea que vaya -le dijo la Luna al viajero entre nube y nube-. Yo siempre iluminaré la noche, tu siempre viajarás y el Jazmín siempre perfumará.
Se hizo un espacio amplio en el cielo, iluminó con la fuerza de la Luna llena el rostro del viajero y agregó:
-Siempre que te sientas lejos y solo, mírame en la blancura y te acercaré a quién desees en el Alma.



Javier Páez Muro

2 comentarios:

Natalia Peralta dijo...

El jazmín perfumará incluso el encuentro de dos almas lejanas en lo alto del cielo...
Irá más allá y unirá esas almas en pétalos de Luna, las envolverá para concederles así la infinitud del Universo.

Natalia Peralta dijo...

La fotografía... recién me detuve a mirarla. Es casi perfecta, pues perfecta es aquella que me envió donde se encuentra ese factor que le da dicha cualidad.